Seminario de Estudios del Carisma Cevco 3 día

CRÓNICA 19 de julio
SEMINARIO DE ESTUDIOS DEL CARISMA
IV CENTENARIO DEL CARISMA VICENTINO
Por: Jesús Antonio Galvis.
Seminario Interno

Iniciamos nuestra jornada orando con la Palabra de Dios. El texto propuesto fue el Evangelio de Mc 5, 1-20 El endemoniado de Gerasa. Fue organizada por el grupo Emaús. En ella se nos invitó a reflexionar sobre la relación del contexto presentado en el texto evangélico con la forma cómo estamos haciendo el apostolado. Después de un breve tiempo de meditar por grupos se finalizó este momento con la oración de la realidad de la calle.

Luego de reparar nuestras fuerzas con el alimento, se dio comienzo a la Conferencia: IV Centenario del Carisma Vicentino. Una actualización del carisma. La experiencia del Beato Federico Ozanam y la Beata Sor Rosalía Rendú por el Sr. Manuel José Flórez Garcés, expresidente de la SSVP y quien en la actualidad trabaja en la SSVP de Envigado.

Después de concluido el trabajo se dio la bienvenida a este Seminario al Padre Gabriel Naranjo C.M. 

En la tarde, luego del almuerzo, el hermano Carmelo Giovani Melo Mujica del Seminario Interno tuvo que retirarse de este seminario de formación con el fin de viajar a Perú para ver a su papá quien se encuentra en un delicado estado de salud. Oramos a Dios por él y su familia para que los fortalezca en estos momentos de prueba.

Después se tuvo la conferencia acerca de la Dimensión mariana del carisma vicentino, por el P. Fenelón García C.M.

La eucaristía fue un momento de encontrarnos con Dios para renovar nuestras fuerzas y el seguimiento de Cristo a través del carisma vicentino. Fue presidida por el P. Jhon Alexander Páez C.M. En ella nos invitó a renovar el fuego abrasador del carisma en nuestras vidas y a ser agradecidos con Dios por estos cuatrocientos años del carisma en la Iglesia, así como por los 50 años de vida consagrada de la hermana Blanca Libia Tamayo H.C.

Finalizada la eucaristía se compartió la cena. Después llegó la noche de la alegría vicentina. Dinámicas, cantos, coplas y danzas propios de Colombia y Perú caracterizaron este momento de gozo, en donde se compartió como verdadera familia que somos.